lunes, 12 de octubre de 2009

El Conejo Rebelde.

Hace mucho tiempo en una selva había un conejo rebelde. Era el más raro de los conejos, lo otros eran normales, a este le llamaban el rebelde porque un día, cogió una guitarra y se puso a cantar rock, desde ahí era el rebelde, hacía cosas tan arriesgadas como decirle a un león chincha rabiña, y cuando los leones salían a correr tras el no le cogían... Un día todos los conejos le dijeron que era muy gracioso pero que tuviese mucho cuidado, porque un día de estos se lo van a comer pero le dijo que no. Cuando se hizo viejo también lo hacía (pero se lo hacía a los viejos) por eso no le cogían. Cuando se murió, todos lo que lo conocían pusieron en una piedra las cosas que había echo, pusieron su nombre y sus apellidos, y los de esa zona siempre lo recordaron.
Y ahí quedo grabado las cosas que había hecho...
En doscientos años un explorador lo encontró y lo puso en un museo y todo el mundo supo lo que había echo y su nombre.

3 comentarios:

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  2. Muy bien, Javi, me gusta que hayas subido el cuento que hiciste en clase. La ventaja que tiene el blog es que todos podemos leerlo en cualquier momento. Es muy divertido, yo creo que más que rebelde era un conejo muy latoso, ¡jajajaja!

    Un beso

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